Trabajar en una empresa mediana o grande favorece que haya un mayor número de frases que se hacen célebres ya que hay más actores y la gente se conoce menos. Las que cito a continuación (todas reales) reflejan todas una situación personal o de trabajo muy característica.
La lección al nuevo
Al entrar a trabajar en la empresa, siempre hay quien se ofrece como amigo y te explica lo que has de hacer para llevarte bien con todos y lo que cuenta en la empresa. Algunas veces incluso salen verdades que a más de uno pondrían rojo como en este caso en el que entra un nuevo jefe, habla individualmente con todos los del grupo y un administrativo le explica como debe actuar para no tener problemas en la empresa y vivir bien sin trabajar mucho:
- Nunca robe ni un duro. La pela es sagrada.
- Tenga la mesa siempre llena de papeles para que se vea que tiene trabajo. Si viene un jefe con algo en la mano mire los papeles, él verá como tiene la mesa y es más que posible que se gire y busque otro que tenga menos trabajo. Si de todos modos viene y le va a dar algo, cójalo, tómelo en la mano y pregunte si es urgente o puede esperar. Haga esto señalando los papeles sobre la mesa. Si es urgente pregunte si para antes de los expedientes extendidos sobre la mesa que también son urgentes o después. Tiene un 80% de posibilidades de que se vaya y se lo de a otro. Si a pesar de ello insiste, ponga el nuevo trabajo en el centro y diga que lo hará en cuanto acabe el que está terminando, sin indicar fecha.
- Tenga siempre los expedientes abiertos. Brazo izquierdo sobre la mesa y la cabeza apoyada en la mano como si pensara en algo. Puede dormir un rato, pero cada tanto tiene que mover la hoja para que parezca que lo estudia. Eso si, en la otra mano el lápiz para marcar lo necesario aunque no haga más que dibujos.
(Nota: El empleado fue cambiado de sección al mes siguiente)
Las Frases
1.- En la ceremonia de la jubilación del probo empleado, éste se dirige a su jefe y le dice:
- Le diré una cosa Sr. XXXXX, muchas cosas de las que me mandaba yo no las hacía porque ya sabía que usted lo solucionaría por otro lado.
2.- El mismo empleado cuando se le pregunta en qué lugar de la agenda de proveedores consta el suministrador de la pintura:
- ¿Dónde va a estar? en la B, busca Bote de pintura.
3.- La secretaria confiesa que antes de llegar el nuevo jefe visitó a una vidente que le anunció que llegaría un hombre en breve que revolucionaría su vida:
- Pero yo esperaba que me diera un meneo y no que me hiciera trabajar.
4.- Las secretarias suelen ser confidentes y sufrir mucho, especialmente si su jefe no es español y su uso del idioma no es el habitual en España y se ofrece a compartir secretaria:
- Ya sabes, puedes usar a mi secretaria para todo lo que quieras.
5.- La llegada del nuevo jefe siempre produce expectación en el entorno, sean empleados a su cargo u otros jefes equivalentes con experiencia y cuerno retorcido:
- Cuando llegaste los jefes estábamos de uñas por si trabajabas más que nosotros.
6.- Está claro, todos miran al nuevo para evaluarle y algunos temen mucho por su puesto, no sea que se note que sabe de lo que habla y haga temblar las estructuras y derechos adquiridos. Así no es de extrañar que el jefe del nuevo reconozca muy a su pesar los valores aportados:
- Debo reconocer que vales, has doblado la facturación, yo no he ayudado en nada y no has alardeado de ello así que podemos trabajar juntos.
7.- La empresa no siempre va bien, las crisis y la ineficiencia o ineptitud de algunos hace que los resultados no sean buenos. En estos casos el alto mando interviene y motiva:
- Estamos mal pero andamos bien.
8.- El mismo director general hizo retirar la exposición de premios habidos en la historia de la compañía:
- Una empresa que no va bien no luce premios del pasado, solo ha de mirar al futuro y asegurarse que éste existe.
9.- Hay empleados que aprendieron la lección de la inactividad y la practican con ahínco. Suelen ser los que dicen "a mi la empresa no me ha dado nada" o "yo ne le debo nada a la empresa". Se les reconoce por llegar pronto y esperar pacientemente a que suene la señal horaria para empezar lentamente a poner orden en la mesa de trabajo, ir al WC y luego, tras comentar la dureza de la jornada con los compañeros, esperar a que esta pase. Un caso especial es el de aquel almacenista que miraba apoyado en la pared durante 10 minutos un objeto en la estantería:
- Es que he de calcular el esfuerzo que he de hacer para bajarlo.
10.- En las oficinas es muy fácil que surjan enamoramientos más o menos duraderos y que inicialmente se intente ocultar su existencia. En algunos casos puede ser incluso peligroso, por ejemplo cuando la secretaria de dirección tiene como amante al jefe del sindicato; ya se ve que puede haber conflicto, así que ¿que mejor excusa cuando las reuniones son de trabajo?
- Si me llaman, estoy haciendo gestiones.
(claro que solo eran dos y en lugares muy poco frecuentados....)
11.- Pero no siempre son así las cosas, hay gente resolutiva y que ante un problema, como por ejemplo equivocarse de dirección en la autopista discurren y paran junto a la cadena de separación de los carriles y comentan:
- ¿Esta cadena no nació aquí verdad? Mejor la desmontamos....
12.- Suelen pasar estas cosas más en los servicios técnicos que en las oficinas y cadenas de montaje. Se trabaja de un modo diferente:
- El servicio técnico no es un departamento de ventas, aquí somos talibanes y actuamos como guerrilleros. La teoría solo sirve para quedar bien, pero la realidad es otra.
13.- Cuando no se vende hay una frase de disculpa universal que todo vendedor conoce y usa:
- Somos caros, caros y malos.
14.- En las empresas siempre está el (odioso) compañero que te ayuda cuando tienes un problema, suele solucionar tu problema dejándote dos, el mismo que tenías y el ordenador totalmente desarreglado. Usa su mejor sonrisa para ayudarte cuando dice:
- Es muy fácil, mira, solo hay que.....
15.- Es entonces cuando vas al jefe a por ayuda y éste que te ve venir se adelanta y te dice con cara grave:
- Déjame que te diga, antes de que empieces tu, que es urgente tener listo el tema de ..., lo ha pedido el gran capo así que ya hablaremos luego.
16.- Hay luchas internas cuando se huele una vacante en "Dirección" (con mayúscula) y hay que advertir claramente que podemos ser enemigos temibles:
- ¿Quieres ser director? Porque entonces somos enemigos y te jodo la producción.
17.- Puede haber sabotajes a compañeros que avanzan más rápidos de lo que se espera de ellos, a esos que venden sin importarles las tradiciones y las costumbres provocando la indignación de algunos:
- No vendemos en este país porque el distribuidor no compra y si no compra ¿para que vamos a ir a visitarle?
18.- Cada uno tiene sus características, los hay dicharacheros, introvertidos, faltos de memoria o ahorradores como el que traía la máquina de afeitar para cargarla en la oficina:
- Es que en casa no me acuerdo de enchufarla (y aquí es gratis).
19.- Las empresas funcionan bajo un extraño régimen político. Funcionan como repúblicas (algunas bananeras) pero siempre proclaman su fe en la monarquía:
- El cliente es el Rey.
20.- El ánimo en general, aunque la empresa no vaya mal, suele ser de sombrero quitado y no por admiración sino por sumisión como bien expresaba aquel administrativo cada vez que iba a una reunión:
- Voy a que me porculicen. Ya veremos como va hoy.